Chistes cortos

-¿Bailas?
-Estoy pedida.
-Ya me olía yo algo...

-Tengo la corazonada de que nos vamos a entender muy bien.
-What?

Entra un hombre a una granja y pregunta:
-¿Tienen patos salvajes?
-No, pero si quiere le cabreo un pollo.

En el restaurante:
-El señor quiere sus huevos...
-¡Con toda mi alma los quiero!

-¿Qué tal las clases para hablar correctamente?
-¡De puta madre, colega!

-Señora, ¿la Notaría?
-Sí, si se acerca un poco.

Dos chinos se encuentran por la calle:
-Hola.
-Las cuatlo en punto.

Un ladrón ataca un matrimonio:
-¡Señora! ¡Deme la cartera o la degollo!
-¡Goyo! ¡Dale la cartera, deprisa!

-Me da una barra de pan.
-Va a tener que ser duro...
-¡Puta, dame una barra de pan o te rajo ahora mismo!

Llaman a una casa y contesta la chica por el telefonillo:
-¿Vienes a cenar, Carmen?
-No, estoy en la cama con amígdalas.
-¡Qué suerte tienes, siempre ligas con griegos!

-Oye, ¿tu burro fuma?
-No...
-Ah, entonces se te está quemando el establo.

En la tienda:
-¿Tiene cacao familiar?
-¿Y a usted qué le importa mi vida privada?

-¡Mamá! ¡Papá está tirando cosas por la ventanaaaaaaaaaaaaaaa...!

En el médico:
-Doctor, ¿qué padezco?
-Hombre, a primera vista parece usted imbécil, pero por su acaso voy a mirarle con el aparato de Rayos X.

Entra al doctor un hombre gordo y pelirrojo:
-Doctor, ¿soy estéril?
-¡Qué va! ¡Tú eres Obélix!

Dos gitanos en un tablao flamenco:
-¡Olé tu madre!
-Olerá la tuya.

-¿Como te llamas?
-Bienvenido.
-Anda, como mi felpudo.

-¿Un pingüino menos un pingüino?
-...
-Ningüino.

-¿Con qué se emborracha un pingüino?
-...
-Con Licor del Polo.

-¿Quieres ser testigo de Jehová?
-Pero si no he visto el accidente...

Tras un apoteósico acto sexual, la chica dice extenuada:
-Pepe, ¡eres un monstruo!
-Anda, pues tú sí que eres fea.